Intersindical de CLM califica de lamentable o poco creíble el discurso de Navidad de la Sra. Cospedal.

La presidenta de Castilla-La Mancha pretende justificar los recortes que está realizando en esta comunidad, como el único método que se puede adoptar para solucionar los problemas económicos de Castilla-La Mancha. En su discurso citó, y siempre culpando a otros para mal justificar sus acciones: “la asfixia económica que amenazaba con quebrar nuestro estado de bienestar exigía además una respuesta decidida”, que se ha plasmado en el Plan de Garantía de los Servicios Sociales Básicos de Castilla-La Mancha, “el plan que necesitábamos para afrontar la crisis con garantía de éxitos”. Pero la pregunta es clara, ¿Cómo es posible que le llame plan de garantía de los servicios sociales básicos cuando precisamente este plan, lo que hace, es debilitar los servicios sociales? Los deteriora recortando presupuestos y reduciendo puestos de trabajo hasta conseguir que los Servicios pierdan calidad, justamente lo contrario de lo que dice querer hacer.

Hay que recordarle a la Sra. Presidenta de Castilla-La Mancha que el “gasto” en sanidad y en educación no es tal gasto, sino una inversión necesaria y que los recortes que se hagan hoy nos pasarán factura mañana y serán los ciudadanos y las ciudadanas los que sufran unos Servicios Públicos insuficientemente dotados.

La Sra. de Cospedal muestra un gran cinismo en su discurso, cuando dice que entiende perfectamente el esfuerzo que están haciendo los funcionarios y las funcionarias de esta comunidad para hacer frente a la crisis, y justifica sus recortes, como la única solución. Es fácil decir que es “plenamente consciente del esfuerzo de los profesionales…”, cuando su sueldo no se toca, y más aún cuando tiene varios sueldos y no precisamente pequeños; esto es un ejercicio de falta de coherencia entre lo que dice y hace la Sra Presidenta de Castilla-La Mancha. Los políticos y las políticas deberían dar ejemplo, en su vida personal, también en la austeridad que predican, y desde luego no argumentar los recortes como la única alternativa. Además no sólo nos baja el sueldo, sino que nos empeora las condiciones laborales y en definitiva empeora los Servicios Públicos, poquito a poco, pero siempre a peor. Sra. Presidenta no pretenda engañar a los ciudadanos y las ciudadanas con este discurso, porque para poder comprender a los demás hay que ponerse en su lugar, haciendo un ejercicio de empatía, y Vd está demostrando que no se pone en el lugar de los trabajadores y las trabajadoras y con su actitud prepotente, sin escuchar a nadie, sin negociar, lo está demostrando.

Socialmente justifica mal los recortes para mantener una sanidad y una educación pública de calidad, o al menos es poco creíble el argumento, cuando ya ha hecho público la privatización de la gestión de 5 hospitales en la región y está anunciando un impulso a la enseñanza privada concertada. ¿Sra presidenta qué queremos favorecer realmente lo público o lo privado en Castilla-La Mancha? Que tengan que movilizarse los funcionarios y las funcionarias, todos y todas en unidad para defender lo Público le pone una mala nota a sus preocupaciones públicas; pero si además, recordamos que el profesorado de Secundaria ha hecho en su corto tiempo de gobierno dos huelgas contra sus medidas, la calificación que tiene es de suspenso.

Su discurso Sra. Cospedal pretende justificar lo injustificable, el ataque a los Servicios Públicos y la defensa de la privatización y lamentablemente a costa de las trabajadoras y los trabajadores públicos.

¿Hasta dónde llegarán los recortes en los sueldos de las trabajadoras y los trabajadores públicos? ¿Cuándo no se les pueda recortar más, quién seguirá pagando las consecuencias de la crísis?

Sra. Presidenta si continúa recortando en lugar de incrementando los ingresos cada vez nos empobreceremos más, y en lugar de ser una “comunidad de primera velocidad”, seremos una “comunidad de marcha atrás” dónde unos cuantos se repartirán la riqueza y otros muchos serán cada vez más pobres. Ya va siendo hora de que empiece a negociar, a crear empleo y a defender con presupuesto y plantilla los Servicios Públicos de todas y todos.

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