Continúan congeladas las retribuciones del profesorado, tras las bajadas salariales de 2010 y 2012, acumulando una pérdida de poder adquisitivo de más del 25 %, a lo que hay que sumar lo que se sustrae a los trabajadores y trabajadoras cada vez que enferman, la eliminación del Plan de Acción social, las ayudas a la formación, etc.