Ahora ha sido en Andalucía, donde hemos asistido al primer y gran triunfo del partido de extrema derecha , luego serán muchos de los territorios del Estado Español los que imitarán este modelo de servidumbre. Ciudadanos y PP han comprobado que para llevar a cabo su mandato necesitan la “llave de la extrema derecha”, y si para ello mujeres, inmigrantes, memoria histórica… se ven perjudicados y retroceden en todo aquello que han avanzado , no hay ningún obstáculo porque el ansia de poder de algunos sobrepasa a cualquier situación humana.
Conocemos que una de las condiciones que ponía Vox en Andalucía para apoyar un gobierno de derechas era que se cambiara el término “violencia de género “ por “violencia intrafamiliar”. También recogen la revisión de la nomenclatura de “trasversalidad de género” en favor del concepto “igualdad”, así los presupuestos para el 2020 sustituirán el actualmente empleado término “Trasversalidad de Género” por “Principio de igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres”. Esta osada ineptitud por parte de este partido nos lleva a pensar que no conocen el Código Penal de este país , “España”, del que tanto presumen ; en concreto en el Título VII , artículo 173.2 :“se castiaga al que habitualmente ejerza violencia física o psíquica sobre quien sea o haya sido su cónyugue o sobre persona que esté o haya estado ligada a él por una análoga relación de afectividad aun sin convivencia , o sobre los descendiente , ascendientes o hermanos por naturaleza , adopción o afinidad , propios del cónyuge o conviviente”. Hasta el 2004 con la Ley de violencia de Género , aprobada en el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, en España se juzgaba la violencia contra las mujeres por parte de parejas o exparejas como violencia doméstica o familiar, de este hecho se dedujo que era necesaria esta Ley porque en la violencia doméstica no hay carga de dominación y creencia de poder sobre la mujer, aquí está la diferencia “querido Vox” , un poco de información y formación.
Desde 2004 contamos con la escalofriante cifra de 1.000 mujeres asesinadas en manos de sus parejas o exparejas, podemos deducir que ninguna mujer cercana a estos hombres ha sufrido violencia de género y no han tenido que llorar su pérdida como esas 1.000 familias. Ahora mismo empieza otra nueva lucha feminista a raíz de los últimos acontecimientos, parece ser que no han sido suficientes años de muertes , abusos, malos tratos, violaciones…que las mujeres hemos sufrido y seguimos sufriendo, que además , tenemos que luchar contra partidos que no creen en la igualdad entre hombres y mujeres y que no reconocen que somos posibles víctimas desde que nacemos por el mero hecho de ser mujeres.
¡Mujeres! se nos tendrá que oír de nuevo en las calles una vez más para decirles que la violencia que existe a nivel intrafamiliar es cruel y debe ser castigada por la Ley, como así se hace, pero que la nuestra es diferente porque nuestra sociedad patriarcal no nos deja ser libres y se empeña en seguir ejerciendo su violencia sobre nosotras. Nos espera un duro camino, pero ahí estaremos luchando.
