Con motivo de las Jornadas que mañana viernes y sábado se desarrollarán en Talavera de la Reina bajo el título “Educación: una cuestión de libertad”, desde STE-CLM queremos manifestar lo siguiente:

Entendemos que asociaciones católicas, como la organizadora de las jornadas, promuevan su visión particular acerca de cómo quieren imponer la educación a las personas que pertenezcan a ellas y a sus familias pero no podemos compartir que lo hagan desde una visión tan sesgada, la de su propia doctrina social como reconocen en sus declaraciones, y bajo un título tan alarmista como engañoso.

La educación, y la libertad de enseñanza, es un derecho fundamental porque así lo recoge nuestra Constitución en su artículo 27, y se está cumpliendo, puesto que de no ser así, la opción más lógica en un estado de derecho como el español sería denunciarlo, y no se están produciendo dichas denuncias.

Tampoco es cierto, como mencionan en sus declaraciones, que la competencia de la educación sea fundamentalmente de los padres. Si fuera así dejaría de ser un derecho fundamental para convertirse en un “derecho fundamentalista” según las convicciones de unas familias u otras. Son los poderes públicos quienes garantizan ese derecho para todas las familias independientemente de sus creencias, en igualdad de condiciones.

Desde STE-CLM, y especialmente en la ciudad de la cerámica, denunciamos la desigual distribución de los recursos económicos públicos hacia la educación privada sostenida con dichos fondos públicos respecto a los centros de titularidad pública, hecho que sí está afectando de una manera clara en la libertad de elección de las familias. En Talavera hay más centros concertados que públicos.

Y es que mientras que los centros privados sustentados con dinero público pueden disponer de ese dinero para acometer mejoras en sus centros y para publicitarse en medios de comunicación cuando se acerca la fecha de solicitar colegios, los colegios de titularidad pública no, por ejemplo, lo cual sí genera una desigualdad entre las familias a la hora de poder decidir en qué centro escolarizar a sus hijas.

La razón de ser de los conciertos fue el que hubiese más alumnado que oferta pública allá por la década de los 80 del siglo pasado. Hoy en día ese alumnado está descendiendo, casi cien por año, por eso, lo lógico y menos gravoso para el dinero de todos sería reducir los conciertos y aprovechar de una manera eficaz y efectiva los recursos públicos, que para eso los pagamos entre toda la población.

La escuela pública, ante esta situación de baja matriculación, sí está en posición de poder satisfacer las necesidades y absorber la demanda escolar, quedando la concertada para aquello para lo que se planeó, un servicio complementario y subsidiario.

Por lo tanto, no compartimos las declaraciones ni los fundamentos que se pretenden trasladar a la población talaverana por considerarlos sesgados, fundamentalistas, y que no afrontan el verdadero debate sobre cómo gestionar la educación.

El STE-CLM exige de nuevo la supresión de los conciertos educativos para mantener la calidad de la enseñanza pública y la estabilidad de las plantillas de los centros.

En Talavera de la Reina, a 21 de Noviembre de 2019.

 

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